El robo de mercancía es un problema frecuente en muchas empresas, pero lo que no todos los empresarios saben es que su seguro podría no cubrir la totalidad de las pérdidas si no está correctamente estructurado.
Esto le ocurrió a una empresa de distribución que sufrió el robo de stock valorado en 80.000 €. Al revisar la póliza, descubrieron que el seguro solo cubría hasta 40.000 €, dejando una parte importante del daño sin indemnización. ¿El motivo? El capital asegurado estaba mal calculado, ya que no se había actualizado con el crecimiento del negocio.
Además, existen diferencias clave entre los distintos seguros que pueden proteger la mercancía:
- Seguro de daños: Cubre el robo dentro del almacén, pero tiene limitaciones si la seguridad no es la adecuada (cierres, alarmas, cámaras…).
- Seguro de transporte: Protege la mercancía en tránsito, pero no siempre incluye robos con violencia o atracos en ruta.
- Seguro de lucro cesante: Compensa la pérdida de ingresos si el robo afecta la operativa de la empresa.
Uno de los mayores errores en las pymes es no revisar los límites de indemnización ni las condiciones de cobertura. Muchas pólizas excluyen robos si no hay señales de fuerza en los accesos, lo que puede dejar sin indemnización en casos de estafas o hurtos internos.
Para evitar estos problemas, es clave realizar un análisis detallado del stock y asegurarse de que la póliza está adaptada a las necesidades reales del negocio. También es recomendable incluir auditorías de seguridad y consultar con expertos para verificar que el seguro contratado realmente cubre los riesgos específicos de la empresa.
Si no tienes claro si tu seguro cubre un posible robo en tu negocio, consúltanos para hacer una revisión y ajustarlo a tus necesidades.
Marta Bufill
Los accidentes en obras son una de las mayores preocupaciones en el sector de la construcción. Las responsabilidades pueden recaer sobre la empresa principal, las subcontratas o incluso los propios promotores. No contar con una póliza de Responsabilidad Civil adecuada puede suponer un grave problema financiero y legal.
En un reciente caso, un operario subcontratado sufrió una caída desde tres metros de altura mientras realizaba trabajos en una reforma. Aunque el trabajador no era directamente empleado de la constructora principal, el cliente exigió responsabilidades a la empresa que había adjudicado la obra. La cobertura de RC Cruzada fue clave para cubrir los gastos médicos, indemnización y defensa jurídica.
En otro caso, en una reforma en el centro de Madrid, un andamio mal asegurado cayó sobre un coche de alta gama que estaba aparcado en la vía pública. La empresa tuvo que asumir una reclamación por daños de más de 40.000 €. Este siniestro puso en evidencia la importancia de contar con una cobertura de RC para daños a terceros.
Es importante diferenciar entre las distintas modalidades de Responsabilidad Civil que pueden ser necesarias según el tipo de empresa:
- La RC de Explotación cubre los daños a terceros derivados de la actividad habitual de la empresa.
- La RC Profesional protege frente a errores en la prestación de servicios.
- La RC Cruzada es imprescindible en obras con subcontratas, ya que cubre los daños que puedan causar otros operarios a la obra o a terceros.
Uno de los errores más comunes al contratar un seguro de Responsabilidad Civil es no revisar si el capital asegurado es suficiente o si las coberturas incluyen protección frente a reclamaciones específicas de cada actividad. No todas las pólizas son iguales, y asegurarse de que la empresa está bien protegida puede evitar un problema millonario en caso de siniestro.
Jordi Fernández
Los seguros de salud colectivos se han convertido en uno de los beneficios más valorados por los trabajadores, incluso por encima de aumentos salariales. Contar con una póliza de este tipo dentro del paquete de compensación de una empresa ofrece múltiples ventajas:
- Acceso a sanidad privada sin listas de espera, lo que permite recibir diagnósticos y tratamientos con rapidez.
- Cobertura para la familia del empleado, incluyendo cónyuge e hijos, lo que mejora la percepción del bienestar del trabajador.
- Consultas de especialistas sin coste adicional, facilitando el acceso a ginecología, traumatología, pediatría y otras especialidades sin necesidad de derivaciones.
- Chequeos preventivos y programas de bienestar, que ayudan a detectar problemas de salud antes de que se conviertan en enfermedades graves.
- Mayor sensación de seguridad y fidelización, ya que el empleado percibe que la empresa se preocupa por su bienestar y el de su familia.
En un mercado laboral donde retener el talento es clave, las empresas que ofrecen seguros de salud dentro de su plan de beneficios sociales consiguen aumentar la satisfacción y el compromiso de sus empleados.
Ventajas para la empresa: ahorro y estabilidad operativa
Además de los beneficios directos para los empleados, los seguros de salud colectivos también aportan ventajas significativas para las empresas:
- Reducción del absentismo laboral: Al facilitar el acceso a consultas y tratamientos médicos sin listas de espera, los trabajadores pueden resolver problemas de salud con mayor rapidez y reincorporarse antes a sus funciones.
- Ventajas fiscales: Los seguros de salud colectivos tienen un tratamiento fiscal favorable para las empresas. Las primas pagadas por la empresa son gasto deducible en el Impuesto de Sociedades, lo que reduce la carga impositiva. Además, para el empleado, este beneficio no se considera retribución en especie hasta los primeros 500 € anuales por asegurado.
- Mejora de la imagen corporativa y el employer branding: Las empresas que ofrecen beneficios atractivos como los seguros de salud son percibidas como empleadores más responsables y atractivos, lo que facilita la captación y retención de talento.
¿Qué tipo de seguros de salud pueden contratar las empresas?
Existen diferentes modalidades de seguros de salud colectivo, que se adaptan a las necesidades de cada empresa:
- Seguro de salud colectivo cerrado: Solo incluye a los empleados de la empresa y no permite añadir a familiares.
- Seguro de salud colectivo abierto: Permite que los empleados amplíen la cobertura a sus familiares.
- Seguro de reembolso de gastos médicos: Los empleados pueden acudir a cualquier especialista, incluso fuera del cuadro médico del seguro, y recibir un reembolso por los gastos.
- Seguro con copago o sin copago: En algunos casos, la empresa asume el 100% del coste del seguro; en otros, el empleado paga una parte reducida por cada consulta o servicio utilizado.
Elegir la póliza adecuada depende del tamaño de la empresa, el perfil de los empleados y el presupuesto destinado a beneficios sociales. Lo más importante es que la cobertura se adapte a las necesidades reales de la plantilla y que aporte valor tanto a los trabajadores como a la compañía.
Irina Balán
Un cortocircuito en el sistema eléctrico de una fábrica textil provocó un incendio que dejó la nave industrial inutilizada. Las máquinas quedaron inservibles y la producción se paralizó durante tres meses. La empresa se enfrentaba a un grave problema financiero, ya que, sin producción, los ingresos se redujeron drásticamente.
Afortunadamente, la empresa había contratado una póliza de seguro de daños que cubría no solo la reposición de la maquinaria y la reparación del edificio, sino también la pérdida de ingresos derivada del siniestro, conocida como lucro cesante. Gracias a esta cobertura, pudieron mantener los pagos a proveedores y empleados mientras se resolvía la situación.
Uno de los errores más frecuentes en estos casos es infravalorar el capital asegurado, lo que puede hacer que la indemnización sea insuficiente para cubrir los daños reales.
También es fundamental revisar que la póliza incluya la cobertura de lucro cesante, ya que muchas empresas solo aseguran los daños materiales y no tienen en cuenta la pérdida de ingresos que un siniestro puede causar.
Para evitar estos problemas, es recomendable hacer una revisión periódica de las coberturas y asegurarse de que el capital asegurado se ajusta a la realidad del negocio. Un seguro bien estructurado no solo protege los activos, sino que puede ser la clave para la continuidad de la empresa en momentos de crisis.
Alejandra Llagotera
Muchos empresarios ven los seguros como un gasto, pero en realidad forman parte de una estrategia clave dentro de la Gerencia de Riesgos, una disciplina que permite minimizar las amenazas que pueden afectar a la continuidad de un negocio.
La Gerencia de Riesgos no consiste solo en contratar seguros, sino en anticiparse a los problemas y diseñar estrategias para evitar que un imprevisto pueda afectar la estabilidad de la empresa.
Un ejemplo claro es el de una empresa industrial que sufrió varias caídas de producción debido a averías en su maquinaria. En vez de asumir cada pérdida como un coste inevitable, aplicaron una estrategia de Gerencia de Riesgos que incluyó la mejora del mantenimiento preventivo, la adquisición de equipos de respaldo y la contratación de una póliza específica de avería de maquinaria. Con estos cambios, redujeron sus paradas de producción en un 40% y evitaron pérdidas millonarias.
Para aplicar una estrategia de Gerencia de Riesgos en una pyme, los pasos clave son:
- Identificar los riesgos: Analizar qué amenazas pueden afectar a la empresa (incendios, robos, fallos en la producción, demandas, crisis reputacionales…).
- Evaluar su impacto: Calcular cuánto costaría a la empresa cada riesgo en caso de materializarse.
- Implementar medidas de prevención: Desde formación en seguridad hasta cambios en los procesos internos.
- Transferir el riesgo: Aquí entran en juego los seguros, que permiten trasladar el impacto financiero a una aseguradora.
- Monitorizar y ajustar: Revisar las pólizas periódicamente para adaptarlas a la evolución del negocio.
El error más común en las empresas es creer que no necesitan analizar sus riesgos hasta que ocurre un problema. Sin embargo, aplicar estas estrategias de manera proactiva puede evitar grandes pérdidas y garantizar la estabilidad del negocio a largo plazo.
José María Closa Moradell
Cuando diriges una empresa, cada decisión cuenta. Sin embargo, no todas las decisiones salen como se esperan y, en algunos casos, pueden derivar en demandas que ponen en riesgo el patrimonio personal de los administradores y directivos. El seguro de D&O (Directors & Officers) es la protección clave para evitar que una reclamación afecte no solo a la empresa, sino también a quienes la gestionan.
Un CEO de una startup tecnológica tomó la decisión de invertir 500.000 € en el desarrollo de un nuevo software. La inversión no obtuvo los resultados esperados y la empresa sufrió pérdidas. Los socios, al ver el impacto económico, demandaron al CEO por negligencia en la gestión. La póliza de D&O cubrió los gastos legales y la indemnización, evitando que el directivo asumiera personalmente el coste de la reclamación.
Otro caso habitual es el de errores administrativos que derivan en sanciones. Una pyme recibió una multa de 75.000 € por una declaración incorrecta de impuestos. Gracias a su póliza de D&O, los administradores contaron con el apoyo de un equipo legal especializado que les permitió recurrir la sanción y minimizar el impacto económico.
También existen casos en los que los empleados pueden demandar a la dirección de la empresa por una supuesta mala gestión. Una empresa de distribución fue denunciada por sus trabajadores al considerar que la administración había hecho un mal uso de los fondos, provocando despidos. En este caso, la cobertura de D&O asumió los costes de defensa legal y permitió negociar un acuerdo sin que los administradores tuvieran que responder con su propio patrimonio.
A la hora de contratar una póliza de D&O, es importante revisar que cubra los gastos legales, posibles indemnizaciones, reclamaciones de socios, empleados y administraciones públicas, además de contar con asistencia en crisis y protección reputacional. Un error de gestión puede ocurrir en cualquier empresa, pero contar con un seguro adecuado puede marcar la diferencia entre una solución rápida y una crisis financiera personal.
Marta Somoza
Miguel aparcó su coche en la calle en Valencia sin imaginar que una tormenta nocturna lo inundaría por completo. Al día siguiente, el motor estaba inservible y la reparación superaba los 5.000 €. Sin embargo, su seguro de automóvil con cobertura por fenómenos atmosféricos se hizo cargo del daño. Si no hubiera contratado esta cobertura, el coste de reparación habría recaído completamente sobre él, dejándole en una situación económica complicada.
No todas las pólizas incluyen esta cobertura. En algunos casos, el Consorcio de Compensación de Seguros se hace responsable, pero solo si se trata de catástrofes naturales, como inundaciones graves. Sin embargo, si la tormenta es considerada un fenómeno meteorológico común, la responsabilidad recae en la aseguradora del vehículo. Por ello, es fundamental conocer las condiciones específicas de la póliza.
Si vives en una zona propensa a lluvias o fenómenos extremos, es recomendable incluir esta protección en tu seguro. Además, evitar estacionar en calles con riesgo de acumulación de agua y estar atento a alertas meteorológicas puede prevenir daños importantes. Miguel aprendió que elegir bien su seguro marcó la diferencia entre un problema serio y una solución rápida y eficaz.
Otro aspecto a tener en cuenta es que algunos seguros ofrecen vehículos de sustitución en caso de siniestros graves. Esta opción puede ser clave para no interrumpir la rutina diaria si tu coche queda inservible. También es recomendable revisar si tu póliza cubre los gastos de traslado y alojamiento en caso de quedar atrapado en una zona afectada por el temporal. Estos detalles marcan la diferencia entre una experiencia frustrante y una resolución eficiente del siniestro.
Mónica Barberà
ASPASIM es una organización dedicada a la integración de personas con discapacidad intelectual. Desde CLOSASEGUROS, apoyamos su labor con donaciones, patrocinio de eventos y campañas de concienciación. Nuestro compromiso va más allá del sector asegurador, porque creemos que la seguridad y el bienestar deben ser accesibles para todos.
Uno de los proyectos más significativos que apoyamos es la "Milla Competitiva Inclusiva", un evento deportivo donde personas con y sin discapacidad compiten en igualdad de condiciones. A través de esta iniciativa, promovemos valores de integración, esfuerzo y superación. También colaboramos en la adecuación de espacios para garantizar accesibilidad total en diferentes entornos.
Si quieres conocer más sobre nuestra labor solidaria o colaborar con ASPASIM, ¡contáctanos! Toda ayuda suma y juntos podemos construir una comunidad más inclusiva y solidaria.
JM Closa Moradell
Si tuvieras que describirte en tres palabras, ¿cuáles serían?
Las tres palabras que utilizaría para definirme serían organizada, proactiva y empática. Me gusta tenerlo todo ordenado y asegurarme de que los detalles se cuiden, así como intentar comprender las necesidades de los demás y ayudarles, para que todos se sientas cómodos y escuchados.
¿Qué te motivó a trabajar en el mundo de los seguros y qué te sigue enganchando hoy en día?
Lo que me motivó a entrar en el mundo de los seguros fue poder ayudar a las personas a proteger lo más importante, su salud.
Hoy en día, lo que me sigue enganchando es la posibilidad de buscar soluciones y ayudar a los clientes, sobre todo en momentos delicados en los que están nerviosos por alguna situación delicada que pueden estar pasando, brindándoles tranquilidad y absoluta dedicación y confianza.
Si tu trabajo en CLOSASEGUROS fuera una película o serie, ¿cuál sería y por qué?
Sería "Misión Imposible", porque cada día es un reto nuevo para encontrar soluciones rápidas, claras y eficientes.
¿Cuál ha sido el mejor consejo profesional que has recibido y cómo lo aplicas en tu día a día?
El mejor consejo que he recibido es que "la empatía y la comunicación son clave". En el día a día lo aplico escuchando a los clientes y ayudándoles a encontrar la solución a sus necesidades, intentando ponerme en su lugar para que se sientan acompañados y entiendan los procedimientos a seguir.
Si pudieras tomarte un café con cualquier persona, viva o histórica, ¿quién sería y de qué hablaríais?
Si pudiera tomarme un café con alguien, elegiría a Florence Nightingale, la fundadora de la enfermería moderna. Me gustaría escucharla en relación con la importancia de cuidar a los pacientes desde una perspectiva humana y científica.
Qué súperpoder te gustaría tener en el trabajo y por qué?
Me gustaría tener el súper poder de la empatía infinita, es decir, tener la capacidad de comprender y sentir exactamente lo que están sintiendo, para poder entender el proceso por el que están pasando, y así tener más empatía y saber cuál es la mejor solución para cada cliente.
Ana Cirera
Si mañana faltaras, ¿podría tu familia afrontar la hipoteca y los gastos diarios? Un seguro de vida puede cubrir hasta 500.000 € por menos de 1 € al día. Juan, con una hipoteca de 180.000 €, falleció sin seguro, dejando una carga económica a su familia.
No lo dejes al azar. Asegura el futuro de los tuyos hoy. Muchas personas piensan que los seguros de vida son caros, pero en realidad, existen opciones muy asequibles que pueden adaptarse a cualquier presupuesto. Además, contratarlo a una edad temprana garantiza mejores condiciones y precios más bajos.
Existen seguros de vida con capital fijo, ideales para quienes quieren una cobertura estable, y seguros con capital decreciente, que ajustan la indemnización según la evolución de la hipoteca o las necesidades económicas de la familia. Cada opción tiene sus ventajas, por lo que es recomendable analizar cuál se adapta mejor a cada caso.
En CLOSASEGUROS, ayudamos a nuestros clientes a encontrar la mejor póliza para que sus seres queridos estén protegidos en caso de imprevistos. Si aún no tienes un seguro de vida o quieres mejorar el que ya tienes, contáctanos para recibir asesoramiento personalizado.
Luis Lloret