Un informe de Estamos Seguros sobre los robos en hogares asegurados en 2020 concluye que los ladrones han trasladado su interés a las segundas residencias del litoral. 

Las medidas del gobierno para contener el virus obligaron a los ladrones a centrarse en las segundas residencias, aprovechando que los propietarios no podían trasladarse a estas. La prueba de ello fue el incremento de incidentes en las zonas costeras y del litoral mediterráneo, así como pequeñas localidades de interior donde abundan las segundas residencias, como Toledo o Guadalajara. 

Este mismo estudio, que analizó los robos en los hogares desde agosto de 2019 a agosto de 2020, presentó un listado de municipios donde es más probable que roben y, casualmente, los municipios costeros de Cataluña están en el punto de mira: 

Indemnizaciones más elevadas 

Las restricciones permitieron a los ladrones actuar con más calma y seleccionar qué apropiarse y, por tanto, llevarse objetos de mayor valor. Porque, cuando operan en la ciudad, los amigos de lo ajeno intentan actuar con mayor rapidez y llevarse objetos más pequeños. En cambio, en una segunda residencia, donde los vecinos no pueden atender tan fácilmente a los robos, suelen coger objetos más voluminosos y de mayor valor

El valor medio de las indemnizaciones de los robos producidos durante 2020 se elevó a 1.333 euros. Las provincias donde la indemnización fue superior fueron Barcelona, Girona, Pontevedra, Lleida y Navarra. Por localidades, lideró Pozuelo de Alarcón, con 2.602 euros de media por indemnización, seguida de Marbella, Alcobendas y Sant Cugat del Vallès, precisamente, localidades donde la renta media per cápita es elevada. 

El seguro del hogar, el gran aliado

Aunque tu segunda residencia no la uses tanto, es imprescindible contar con un seguro de protección para ella. Probablemente, habrás invertido mucho dinero para sentir este inmueble como tu segunda vivienda, poder disfrutar en ella de los días de descanso o, como ha sucedido con la pandemia, para trabajar en un entorno más tranquilo. Y, precisamente por esto, también debemos poder sentirnos seguros en ella. 

Conscientes de la importancia que las características diferenciales de las segundas residencias, las aseguradoras han diseñado productos específicos para estas viviendas. Porque ya no sólo se trata de robos, sino también de los riesgos por no usar la casa, como fallos de calderas, tuberías o los fenómenos atmosféricos como fuertes nevadas o ventoleras. 

En CLOSASEGUROS, además de proteger tu casa, cuidamos también de tu segunda residencia, con las coberturas que más te interesen y necesites. ¡Contacta con nosotros!

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